Calefacción
Cualquiera sea el tipo de calefacción que se disponga, las medidas a adoptar para reducir el consumo energético se agrupan alrededor de tres ideas.
- Aslamiento
- Temperatura
- Buenas costrumbre.
El aislamiento
- Una parte del calor escapa de las viviendas por las paredes, puertas, ventanas, caja de las persianas, etc.
- Instalar algún tipo de aislamiento térmico en paredes y techo, por ejemplo, paneles de telgopor. (Aísla además el ruido).
- Instalar doble acristalamiento en las ventanas.
- Instalar burletes adhesivos en los cierres de puertas exteriores y ventanas, cerrando así las rendijas.
La temperatura
- En condiciones normales, la temperatura exterior con la que el cuerpo humano encuentra la sensación de bienestar es ligeramente inferior a los 20º C. Es completamente errónea la idea de que cuando más calor hace en una casa más confortable resulta . Por ello:
- Intentar mantener la temperatura en el hogar alrededor de los 20 º C.
- Para dormir suele ser suficiente una temperatura entre 15 y 17 º C.
- Tratar de no usar la calefacción para mantener un ambiente precisamente opuesto al que impone la estación del año: estar completamente desabrigado dentro de la casa en invierno no sólo es perjudicial para la salud sino un consumo innecesario de energía.
Buenas costumbres en cuanto a la utilización.
- Para la calefacción el mejor sistema es el gas natural,. Los calentadores eléctricos tienen un consumo energético mucho mayor.
- Apagar la calefacción por la noche.
- No encender la calefacción hasta después de haber ventilado la casa y cerrado las ventanas.