El agua es el elemento más importante para la vida. Es vital para el ser humano, así como para el resto de animales y seres vivos.

El agua es fundamental  para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Debido a que cada célula de nuestro cuerpo necesita del agua para funcionar de forma adecuada. Es muy importante mantenerse bien hidratado, sobre todo en épocas de mucho calor.

El simple hecho de que el 70% de nuestro cuerpo esté conformado por agua lo hace un elemento indispensable para que las múltiples funciones del organismo puedan desarrollarse normalmente. Y es por eso que el consumo regular de agua lo convierte en uno de los principales hábitos saludables para las personas. Aquí te contamos algunos beneficios:

Es el componente principal de todos los fluidos corporales, entre los que se incluyen los jugos digestivos, la sangre, la orina y la transpiración. A su vez, participa de muchas de las reacciones esenciales del cuerpo (por ejemplo, en la hidrólisis, un proceso básico de la digestión).

Es un lubricante esencial: permite las secreciones mucosas del intestino, de los pulmones y humedece las articulaciones para que puedan funcionar. Además, el agua de nuestro cuerpo es capaz de disolver la mayor parte de las sustancias que forma o utiliza el organismo, contribuyendo a su correcta absorción. En este marco, la presencia de la saliva es fundamental, ya que hace posible ingerir los alimentos. También sirve como medio de distribución en los sistemas circulatorio y linfático, y cumple la función de transportar los desechos que serán eliminados. Asimismo, asegura el pleno funcionamiento de los riñones en la eliminación de los residuos.

Hidratar el cuerpo es importante, ya que a lo largo del día este pierde líquido producto del funcionamiento y el desgaste cotidiano, a través de la transpiración y la orina.

La mejor manera de incorporar líquidos es mediante el agua que se bebe, o ingiriendo frutas y verduras, que también contienen agua. Si la sudoración es extrema, se recomienda la ingesta de otros líquidos enriquecidos con sales minerales (como las bebidas isotónicas) para la recuperación de las sales que se pierden a través del sudor. El papel del agua en la prevención de enfermedades también es sumamente destacable. De acuerdo a estudios de la Asociación Dietética Americana, el consumo de agua segura disminuye el riesgo de:

• Resfríos.

• Cálculos en los riñones.

• Cáncer de mama, colon, tracto urinario.

Las funciones del agua en el cuerpo son diversas y muy importantes. Su papel se sintetiza en seis capacidades distintivas:

• Hidratos

• Diluye

• Lubricante

• Transporte

• Protege

• Regula

• Regula la temperatura:  Imagina que es un día muy caluroso, el sol apunta directamente sobre tu piel y tu temperatura corporal comienza a incrementarse. Tu cuerpo reacciona y empieza a liberar sudor para refrescarte y mantener tu temperatura corporal dentro de los rangos aceptables y para que no vayas a sufrir ningún desmayo. 
• Transporta nutrientes:  recuerda que la sangre es el medio por el cual los nutrientes viajan y esta, está hecha en su mayoría por agua, así que es importante que te mantengas hidratado para que tu cuerpo sea capaz de llevar todos los nutrientes a las células correspondientes. . . 
• Elimina deshechos:  Tus riñones capturan los compuestos que no le sirven a tu cuerpo presente en la sangre y los elimina mediante la orina (la cual, nuevamente, está conformada por una gran parte de agua).
• Facilitar la digestión:  El agua es un elemento fundamental para que tu cuerpo pueda llevar a cabo la digestión, al estar presente es más sencillo que tu organismo procese los alimentos y se pueda dar la absorción de nutrientes. 

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