La Federación Nacional Trabajadores de Obras Sanitarias (FeNTOS) celebró ayer el Día del Trabajador Sanitarista, que conmemora el puntapié inicial, en 1874, de la Planta de Purificación de Recoleta, en la Capital Federal, la primera obra de salubridad que separaba el agua potable de las aguas cloacales.

“En 1871 tuvo lugar una epidemia que se cobró la vida de miles de personas en nuestro país: la fiebre amarilla. Este lamentable hito dio como resultado la formación de una Comisión de Aguas Corrientes, puntapié inicial para la creación -en 1874- de la Planta de Purificación de Recoleta, la primera obra de salubridad que separaba el agua potable de las aguas cloacales”, recordó el gremio que encabeza el Secretario General, Carlos Adamo.

Desde la Cooperativa de Provisión de Obras y Servicios Públicos Limitada de Armstrong, enviamos un saludo cordial a los Trabajadores de Obras Sanitarias. Su labor y compromiso diario son fundamentales para asegurar que todos tengamos acceso a un servicio tan esencial como el agua potable y el saneamiento. Su dedicación y esfuerzo constante garantizan la salud y bienestar de nuestras comunidades.
¡Gracias por su invaluable trabajo! ¡Feliz día!